Una de las cosas más deliciosas de la ansiada llegada del nené es preparar su habitación. Es ese el punto donde todos explotamos nuestra creatividad, nuestra sensibilidad y nuestra illusión. Y allí debemos también tomar muy en cuenta que este probablemente será el espacio en el que más tiempo pasarán los papás con el nené.
Como el bebé durante los primeros meses de vida va a pasar mucho tiempo dormido, es aconsejable reservarles un lugar tranquilo y fresco. Es muy útil disponer en ese espacio, de forma cercana, la cuna, el cambiador, el mueble de la ropita y el organizador para los pañales. Algunos papás optan por bañar a los bebés en sus habitaciones durante los primeros meses, para evitarles así las corrientes de aire que pueda haber en la casa; en esos casos, es útil tener un espacio fijo en donde se colocará la bañera y tener cerquita todos los implementos del baño.
Para la cuna son recomendables los móviles, sobretodo los que tienen música, para entretener al bebé. Hay también unas bellezas que, además de los muñequitos tradicionales girando, proyectan figuras en el techo de la habitación. Y para cuando van siendo más grandecitos, hay unos más resistentes que tienen colgando muñequitos que invitan a la interacción con el bebé, incitándoles a tocarlos o halarlos para producir cómicos sonidos.
Si el espacio lo permite, suele ser muy cómodo para arrullarle o darle pecho tener una mecedora. Así, mamá y papá pueden estar cómodamente sentados mientras los duermen, les cantan, les hablan o les dan de comer. Algunas mecedoras traen incluso la opción de un banquito para posar los piés que se mece igual que la mecedora… ¡fabulosos para el descanso completo de mamá!
En el tema de la decoración… ¡el infinito es el límite! Hay quienes optan por los viniles, que son una opción preciosa además de sencilla y rápida. Otros escogen pintar a mano, lo que es perfecto para darles ese toque artístico personal. También existen una cantidad de “decoraciones pre-hechas” que van a juego con la ropa de la cuna, las lamparitas de la mesita de noche y las cortinas de la habitación. Todo dependerá de la elección que más le guste a los papás.
En general, esta decoración puede permanecer hasta los primeros dos años de vida. Luego se hace necesario que el nené pase a la cama y ya no se requiere el cambiador porque dejan los pañales. Así van cambiando las necesidades y los papás vamos redecorando según las nuevas demandas de los nenés.